Julio Diz

Nació en la ciudad de Lanús, Buenos Aires, Argentina, el 27 de junio de 1956. Desde muy pequeño concurrió al cine, descubriendo a Walt Disney en el viejo Cine Monumental de la ciudad de Bernal. Ya de grande, Román Polanski y su film, “Cul de Sac” fueron los movilizadores hacia el cine de culto. En los años ’70, estudió cine en la EDAC, (Escuela de arte cinematográfico) de la ciudad de Avellaneda. En los ’80 cursó en CECINEMA, (Centro de estudios cinematográficos) dirigido por José Santiso, y asistió al Seminario Introducción al lenguaje cinematográfico, dictado por Simón Feldman. Incursionó en el Cine de Súper 8 y 16 MM. Asociado a UNCIPAR (Unión cineistas en paso reducido), fue cofundador del Biógrafo de la Alondra. Es editor de Woody y todo lo demás, Series de antología y el presente blog. Actualmente trabaja en su primer libro, “Los tiempos del cine”.

jueves, 26 de diciembre de 2013

Estrellas en el cielo: Mirna Loy (1905- 1993)




Mirna Loy fue una  de las actrices más importantes de la década de los años 30.

Su popularidad fue tal, que  fue elegida por el público como” la reina de Hollywood”,  junto al siempre carismático  Clark Gable  ,que tuvo el privilegio de ser nombrado “El Rey “.

Nació en Montana el 2 de Agosto de 1905. Al fallecer su padre, cuando ella contaba con 13 años de edad, se trasladaron a los Angeles donde Myrna comenzó a hacer teatro. En el año 1921 posó para una estatua del artista Harry Winnebrenner, llamada “Spiritual”,  que aún sigue expuesta en Venice High Scholl y que se puede ver  en una de las escenas iniciales de la película “Grease”.

En una de sus actuaciones fue descubierta por el gran Rodolfo Valentino, que la introdujo en el mundo del cine a mediados de los años 20.

En su primera etapa como actriz de cine mudo ,se la encasillaba en papeles exóticos y de vampiresa, debido a su físico moreno y seductor,apareciendo en películas como “Ben-Hur”, que años después se rodaría en tecnicolor,”Don Juan” etc..

Con ”El cantor de Jazz” (1927),  pudimos oir por fin su voz,  ya que esta película fue la primera producción sonora del cine.




Loy, supo adaptarse muy bien a la transición del cine mudo al sonoro , y consiguió desligarse de sus papeles de mujer fatal, interpretando musicales de gran éxito como “The Desert Song”,”Arriba el telón”o “Under A Texas Moon”. Gracias a la popularidad que le aportaron, pudo demostrar posteriormente que era una todoterreno, y que podía interpretar cualquier tipo de papel.
A partir de este momento Myrna afrontó papeles más ambiciosos, interpretando películas de diferente género como cómicas con “A Conectituc Yanqui”, o de terror con “La mascara de Fumanchu”.

En 1934 interpretó la película más referente de su carrera “Enemigo público número 1″,compartiendo cartel con Clark Gable y Willian Powell. La cinta obtuvo un Oscar a la mejor historia, y el trabajo de los tres protagonistas fue increíblemente bueno. Aunque hoy en día el film ha perdido algo de fuerza, debido a la poca acción que se desarrolló en la cinta, hay que destacar  que  los efectos especiales de la época eran muy pobres , por lo que se intentó explicar la historia más a base de diálogos, que de otra cosa.




En esta época Myrna era ya muy popular y por lo tanto sumamente  deseada por figuras ya consagradas de Hollywood como John Barrymore y Clark Gable, pero ella ya estaba involucrada sentimentalmente ,y se negaba a todas las peticiones de sus innumerables pretendientes.
De sus  papeles de mujer fatal, pasó a interpretar papeles de esposa perfecta, tanto fue así, que  hasta se creó  un club de personas que expresaban su deseo de convertir a la actriz en su esposa.
Aunque en estas fechas era enormemente popular, desapareció durante un año del cine, pues consideraba que la MGM la explotaba y que no cobraba el sueldo que ella merecia (se puede comprobar que por esta misma situación pasaron muchas actrices de aquella época donde imperaba claramente el machismo).

Al pasar este año consiguió finalmente su deseo pues le subieron el sueldo y le otorgaron un bono de 25.000 dolares. A partir de esto se consagro definitivamente en el cine con títulos como "El gran gfeld”, junto a William Powell (on el que trabajaría en numerosas ocasiones), “Una mujer difamada”(1936), junto  figuras de la talla de Jean Harlow,Spencer Tracy o William Powell, o “Piloto de pruebas”(1938), película que compartió con Clark Gable , y que obtuvo tres nominaciones a los Oscars. Durante el lanzamiento de la cinta “Parnell” (1937)que rodó junto a Gable fue  cuando fue votada, por mas de 1.500.000 depersonas que participaron en una encuesta, como la Reina de Hollywood.



En los años 40 no trabajó tanto, pero realizó algunos de los títulos más populares de su carrera como “Te quiero otra vez”(1940), o”Los mejores años de nuestra vida”(1942), película en la que compartió cartel con Dana Andrews, y que consiguió numerosos premios,entre ellos 7 Oscars y un Globo de Oro como mejor película,y que actualmente se considera una obra maestra del séptimo arte. El film , cercano y sencillo ,ha pasado a ser considerado imprescindible para cualquier cinélifo, sin ninguna duda es para mi gusto uno de los mejores clásicos que se rodaron en aquellos años.

Con el inolvidable Cary Grant compartió comedias maravillosas como “El solterón y la menor”(1947), o “Los Blandings ya tienen casa”(1948), demostrándonos años más tarde su gran calidad artística en  un drama llamado  “Corazones solitarios”(1958), en el cual compartió cartel con el atormentado Montgomery Clift.


Ya en los años 60 Myrna apareció en títulos como ” Desde la terraza”(1960), junto a Paul Newman, o “Locos de Abril”(1969), junto a Jack Lemon y Catherine Deneuve.
Sus apariciones en los años 70 fueron esporádicas, interviniendo en pequeños papeles en algunos títulos como “Aeropuerto 75″(1975), o”Pánico en el ascensor”(1974), film que fue rodado para la televisión.Su última actuación cinematográfica se produjo con la comedia “Dime lo que uieres”(1980) , dirigida por Sidney Lumet.






Aunque nunca fue premiada con un Oscar por sus actuaciones, la academia le concedió un Oscar Honorífico en el año 1991 por toda una carrera. Lo terrible es que debido a su avanzada edad ni siquiera pudo ir personalmente a recogerlo, pero mediante una conexión en directo pudo dar las gracias personalmente y manifestar así lo feliz que sentía, por tan gran consideración.

Myrna fue una mujer con numerosas implicaciones sociales, destacando en su lucha por la igualdad de las mujeres. Fue miembro de la Unesco y del Partido democrata, y se manifestó sin miedo contra el régimen nazi, situación que le provocó numerosos problemas, pues su nombre apareció en la lista negra del macarthismo.

Su vida sentimental fue bastante agitada, ya que se casó cuatro veces. Ella misma llegó a decir:”Soy la mujer perfecta. Me he casado cuatro veces, me he divorciado cuatro veces, no he tenido hijos, y no sé ni tan siquiera cocer un huevo”. Con esta frase se ponía de manifiesto el agudo sentido del humor con el que contaba tan entrañable actriz.






Myrna nos dejó un 14 de Diciembre de 1993 cuando contaba con la edad de 88 años.Ese día nos dejó una maravillosa actriz, pero también lo hizo un ser humano excepcional, que dejó una huella imperecedera tanto en el cine, como en el corazón de muchos que la amaron por su bondad y su lealtad.


Fuente: ttp://sqsmaravillosa.wordpress.com/2010/07/26/biografia-de-myrna-loy/

miércoles, 18 de diciembre de 2013

Cine y futbol, El cura Lorenzo.

El cura Lorenzo es una película de Argentina de 1954, dirigida por Augusto César Vatteone, protagonizada por Ángel Magaña. Fue filmada en los Estudios Libertador y estrenada el 28 de julio de 1954, en Buenos Aires. En España la película fue exhibida en 1961 con el título de Los descarriados.



Sinopsis

La película recrea libremente la historia por la cual el sacerdote católico Lorenzo Massa, inspiró la creación del club San Lorenzo de Almagro, en 1908.
La película describe al barrio de Almagro de ese entonces, como una zona marginal de Buenos Aires, en el que los niños se encontraban solos en la calle, expuestos a ingresar a las pandillas de delincuentes que dominaban el sector.
En ese ambiente, el padre Lorenzo (Ángel Magaña), nota que solo unas pocas ancianas asisten a su parroquia, y decide acercar a los niños a la religión, comprando una pelota de cuero (inaccesible por su precio para los niños pobres) y ofreciéndoles los terrenos de la iglesia para jugar al fútbol.
Ese proyecto cuenta con la oposición del jefe de la “patota” (Tito Alonso) de delincuentes juveniles del barrio, quien se convierte en la contra figura moral del cura Lorenzo.
La puja entre ambos se concreta en uno de los “pibes” del equipo de fútbol de la parroquia (Oscar Rovito), que a su vez es hermano del matón.

Misceláneas

El 1 de abril de 1908, el cura Lorenzo Massa, de la parroquia San Antonio del barrio de Almagro, vio a un grupo de niños jugando al fútbol en la esquina Treinta y Tres Orientales y México. Como era peligroso le ofreció jugar en la cancha de fútbol de la parroquia, a cambio de ir a misa todos los domingos.
Los chicos aceptaron y pocos días después fundaron un club. En la discusión por el nombre, y cuando
ya se habían puesto de acuerdo en llamarse “Los Forzosos de Almagro”, Massa, quien se encontraba presente, manifestó su desacuerdo debido a que podía ser asociado con la violencia. Algunos propusieron entonces denominar al club con el nombre del sacerdote: Lorenzo Massa, en agradecimiento por haber facilitado el campo de juego. Massa entonces, explicó que eso implicaría un pecado de soberbia, y propuso a cambio que se eligiera el nombre de su santo. Inmediatamente después, Federico Monti, propuso que cualquiera fuera el nombre, debía llevar el agrego del barrio al que pertenecía. Así se aprobó la denominación “San Lorenzo de Almagro”.

En el elenco aparece Julio de Grazia, en su segunda película.



Actores

El actor Ángel Magaña representó el papel del cura Lorenzo.
Tito Alonso (el matón)
Nelly Meden (jovencita del barrio)
Eloy Álvarez
Oscar Rovito (el pibe)
Roberto Durán (novio de la joven)
Lalo Malcolm
Domingo Mania
Bernardo Perrone
Panchito Lombard
Esperanza Palomero
Ricardo Greco
Arturo Arcari
Vicente Ariño
Julio de Grazia
Juan Laborde
Pablo Cumo

Premios

Premios Cóndor de Plata: Mejor Actor (Magaña), Mejor Libro Original
Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de la Argentina: Julián Bautista, Mejor música



Ficha técnica

Dirección Augusto César Vatteone
Guion Nora Celso y Francisco Guerreño según el argumento de Néstor L. Castro, Osvaldo Falabella
y Augusto César Vatteone
Música Julián Bautista
Fotografía Bob Roberts
Montaje Nello Melli
Escenografía Carlos T. Dowling

País Argentina
Año 1954
Género Histórico, deportivo, drama
Duración 89 min
Idioma Español
Productora Enrique Faustín

Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/El_cura_Lorenzo

martes, 10 de diciembre de 2013

"El lado bueno de las cosas", la locura de amar.


 


Uno de los datos más llamativos de las nominaciones a los Oscar que se entregarán el próximo 24 de febrero es que, después de más de treinta años, una película vuelve a competir por las estatuillas de mejor película, dirección, guion y las cuatro categorías de interpretación. ‘Rojos’ (‘Reds’, Warren Beatty, 1981) había sido la última, hasta que ha llegado ‘El lado bueno de las cosas’ (‘Silver Linings Playbook’, David O. Russell, 2012).
Gane o no (lo tiene muy difícil pero no imposible), la película ya es un éxito. Ha recibido un buen puñado de premios desde su presentación en el festival de Toronto y lleva recaudados más de 100 millones de dólares en las taquillas de todo el mundo —ocupa el segundo puesto en el actual box office español—, cuando su presupuesto fue de apenas 20. La crítica norteamericana parece haberse puesto de acuerdo en señalar que tiene el mejor reparto del año, y aunque esto me parece una exageración, es evidente que lo mejor de ‘El lado bueno de las cosas’ son las interpretaciones. Russell vuelve a exprimir a sus actores y logra disimular así las torpezas de un relato que es más convencional de lo que aparenta.

Russell firma también el guion de la película, basada en la novela ‘The Silver Linings Playbook’, escrita por Matthew Quick. El personaje central es Pat, un profesor que abandona una institución mental y trata de recuperar el control de sus emociones después de sufrir una crisis al descubrir que su esposa le estaba siendo infiel. Bradley Cooper da vida al protagonista, y lo hace bien, se le ve implicado y reacciona con verosimilitud en la mayor parte del film, pero es un tipo que no encaja demasiado en el perfil del personaje —de hecho, insisten en que Pat ha perdido mucho peso en pocos meses, pero un cambio tan drástico dejaría huella—, es una de las nuevas estrellas de la industria y no hace mucho lo nombraron el hombre más sexy del planeta. Es un triunfador disfrazado (hábilmente) de perdedor.

Pat sufre un trastorno bipolar, ha perdido su empleo, sus antiguos compañeros huyen al verle, su mujer se divorció y tiene una orden de alejamiento contra él, un policía sigue de cerca sus pasos por si vuelve a tener un arrebato violento, y para colmo, tiene que vivir con sus padres, que es poco menos que admitir que tu vida ha sido un fracaso. Pat ha tocado fondo. Pero mira tú por dónde, un día conoce a una chica que está disponible y que también atraviesa una mala racha tras perder a su marido; y no es cualquier joven, es Jennifer Lawrence, otra de las estrellas del Hollywood actual, es habitual verla en revistas y páginas de cotilleos y moda. Del mismo modo que Cooper como Pat, chirría la elección de Lawrence para Tiffany, a pesar de que la actriz maneja perfectamente las claves de su personaje y habla como si los diálogos salieran originalmente de su cabeza.

Quedaría mejor si David O. Russell apostase decididamente por un enfoque cómico y absurdo, ahondando en la idea de que todos estamos un poco locos, nos obsesionamos de forma absurda y necesitamos sentirnos amados, pero no puede hacerlo o no quiere —quizá porque tiene un hijo con el mismo trastorno que el protagonista y/o por presiones de los hermanos Weinstein, expertos en el juego de los Oscar—, optando por acercar la historia al drama, mostrando ligeramente el sufrimiento de Pat y quienes le rodean. Hay escenas donde parece que el cineasta va a retratar con crudeza los diversos problemas en los que están envueltos los personajes, pero no lo hace, solo rasca la superficie.
Porque en el fondo ‘El lado bueno de las cosas’ no es más que una amable dramedia romántica con toques excéntricos pensada para cautivar al mayor público posible, envuelto de forma muy competente. Pat encuentra su medicina en ese nuevo amor y aprende a bailar en tiempo récord —lo justo para que todo salga bien—, su padre —un Robert de Niro más controlado de lo habitual pero lejos de su mejor nivel— se queda en un entrañable maniático, Jacki Weaver está de adorno, Tiffany solo necesitaba otro novio serio, John Ortiz exagera tanto su comportamiento que pierde sentido y Chris Tucker se limita a ser el típico negro gracioso del cine comercial.

Con todo, la película resulta muy entretenida, el reparto logra engancharte y que necesites ver la resolución de la historia, previsible pero no por ello menos acertada —hay un par de escenas estupendas en el convencional tramo final (el error en la ejecución del salto y la lectura de la carta)—, destacando por encima de todo la química entre Cooper y Lawrence, una formidable pareja que repite en el nuevo film de Susanne Bier, ‘Serena’ (2013). Es incomprensible que ‘El lado bueno de las cosas’ aspire a 8 Oscar, estando nominado Russell y no Kathryn Bigelow por su fascinante último trabajo, pero su éxito no tiene nada de raro, divierte y transmite buen humor, nos da una palmadita en la espalda y nos dice que todo saldrá bien. Es justo lo que necesita mucha gente en estos momentos.

Fuente: Otra crítica en Blogdecine